Reseña - Ardiente Verano (Noelia Amarillo)

     Título Original: Ardiente verano

 Editorial: Éride Ediciones

Colección: Letra eNe

Fecha Publicación: 05/2011

ISBN: 9788415160649

Páginas: 475

Cubierta: Tapa blanda

Precio: 13.00€

Valoración: 5/5

Sinopsis:

María, una mujer de poco más de treinta años, con un hijo adolescente y una vida cómoda en Madrid, se ve «obligada» a pasar las vacaciones de verano en el pueblo de su ex marido. Y no es que le haga mucha gracia… Un día, perdida en la sierra, encuentra una rústica cabaña de madera en un claro del bosque. Junto a ella hay un pequeño cercado con dos caballos; incapaz de resistir la curiosidad, se acerca para recrearse en sus movimientos sin saber que ella misma está siendo observada. A partir de ese momento todo su mundo dará un giro radical. Todo en lo que cree cambiará a manos de un desconocido que no permite que le vea la cara mientras le ordena, susurrante, que haga lo que jamás se atrevió a hacer. ¿Lo hará? ¿Se dejará llevar por las palabras encendidas, las caricias ocultas y la pasión prohibida de un hombre al que ni siquiera puede ver el rostro?

Opinión Personal: 

Es increíble. Cualquier otra cosa que pudiera decir de Ardiente Verano se quedaría completa y absolutamente corta. 

Debo decir que ésta ha sido la primera novela que he leído de (la fantástica) Noelia Amarillo, una autora de nuestra tierra (¡aleluya!) a la que no sólo debo agradecerle la, posiblemente, mejor y más intensa historia de amor que yo haya leído nunca, sino que me haya devuelto una fe que ya creía extinta en la novela erótica, que en los últimos años había degenerado en un absurdo vulgarismo soez y había perdido toda la esencia que yo le encontré en mis (hormonadísimos) quince años. 

La historia comienza de boca de María, nuestra protagonista femenina con la que me he sentido bastante identificada en muchos aspectos; una mujer ahogada en la rutina, con una vida predecible que ella misma se ha forjado después de un pasado que, en su lugar, yo también querría olvidar, y en el que se ha aislado para no tener que verse expuesta a ningún tipo de sentimiento, bueno o malo, porque quien no arriesga no gana pero, quien arriesga demasiado, corre el riesgo de romperse. 

Es la típica madre sobreprotectora que, desde que por X motivos se quedara sola a cargo de su hijo adolescente, Andrés, ha vivido casi exclusivamente por y para él. Andrés ha sido, en una actualidad en que el 90% de los adolescentes ficticios poseen una extraña (y, bajo mi punto de vista, chirriante) madurez inherente, un soplo de aire fresco. Como hermana mayor de un chico de apenas un año menos que él, puedo afirmar con total seguridad que Noelia no sólo sabe dar profundidad a los protagonistas adultos, sino a cada personaje dentro de su etapa y lógica. 

No obstante, la autoimpuesta y segura rutina de nuestra protagonista se ve truncada cuando, queriendo escapar del aburrido pueblo, del ardiente verano de Mombeltrán, decide perderse por el bosque. Tanto es así, que acaba perdiéndose de forma literal y camina hasta encontrar un claro donde se adentra a observar a un hermoso semental que corteja a una yegua, y... Ahí tenemos el primer contacto con el Desconocido.

-¿Qué están haciendo? -se preguntó María. - El semental danza para la yegua -susurró una voz ronca sobre su nuca, a la vez que un cuerpo duro y cálido se pegaba a su espalda. - ¡Qué...! -María intentó volverse, pero unos fuertes brazos la rodearon por los hombros y unas manos ásperas se posaron sobre las tuyas, inmovilizándola.

Hablaré en plata: Me cagué en todo cuando se me acabó el libro. La historia no es buena, es cojonuda. Pero el Desconocido... Aish, el Desconocido me ha robado el corazón ú.ù

Es un hombre, hombre. Salvaje, brusco, en ocasiones un tanto prepotente, manitas, sexy hasta morirse (y no me refiero a esa visión de la sensualidad que hemos adoptado, una vez más, absurdamente hoy en día, sino a la verdadera sensualidad, la que se imprime en los gestos y en las miradas, en las palabras y en tono de voz, en la forma de caminar y expresarse) y, a la vez, tierno, cariñoso, protector, un punto inseguro, pero siempre decidido a conseguir su sueño, a conseguir a su mujer, como tantas veces se refiere a ella a lo largo del libro. 

Aún así, pese a mi profundo enamoramiento en cuanto a mi querido Desconocido (babas here), para mí el personaje más absolutamente genial de toda la historia es el abuelo Abel, suegro de María.
Es el típico ancianito de pueblo que se las sabe todas y que siempre se las ingenia para hacer lo que quiere él y, además, que los demás lo hagan también. Manipulador (pero siempre para el bien de los suyos), entrañable y fiel a las tradiciones, algunas de sus salidas, como un personaje se refiere a él en un punto del libro, recuerdan al mismísimo Maquiavelo. 

Respecto a la ambientación, es un auténtico WIN por parte de la autora. Ardiente Verano es una novela que recomiendo absolutamente a todo tipo de público (de la adolescencia para arriba, eso sí, porque las connotaciones de su título y portada no hacen justicia a lo verdaderamente ARDIENTE que es la increíble narración y la más destacable prosa, sencilla, fresca y amena, con la dosis justa de modernismos, de Noelia Amarillo), pero más aún para aquellos que, como yo, no sólo vivan en Madrid, sino en la sierra.

No me queda más que recalcar que es una novela con la que DEBÉIS haceros, tal y como yo me haré con la bibliografía completa de ésta autora que se centra en el género romántico-erótico y lo desarrolla de una forma sublime.